El patio de los naranjos no es el de Monipodio. En el de Monipodio otro Monipodio hacía su representación y confundía a la gente. También. Pero no era este. En este ese trabajo es asumido por el Cabildo. En Monipodio [se] ha convertido el Cabildo Catedral el Patio de los Naranjos, siempre en busca del negocio generado a costa de las inmatriculaciones, algunas de las cuales ya las han vendido, para hacerlas irrecuperables y otras se dedican a explotarlas a más no poder para compararlas cada día más con aquellos templos dónde se adoraba el cambio, la compraventa y la especulación antes y por encima del culto. De ningún culto. A eso están volviendo. El negocio de las entradas y otros negocios son notorios y muy rentables en la Mezquita de Córdoba, en la Catedral, en la Giralda, en el Patio de los Naranjos, hasta el 92 plaza pública y desde entonces recinto cerrado, justificado ya sólo en el negocio a costa de vecinos y visitantes.
El patio de los naranjos. imágen de archivo