n paralelo con una cada vez más importante doctrina hipotecaria, la nueva legislación –en tiempos del inicial franquismo- buscó precisión y otorgar así carácter científico al nuevo Derecho inmobiliario registral
La extralimitación operada por la legislación de 1946, rebasándose los límites de la Ley de 1944, ha sido ya entonces denunciada, estimándose que la teoría y la práctica de la excepcionalidad, de esa manera de inmatricular los bienes, eran fundamentales.
Las certificaciones posesorias acreditaban la POSESIÓN, mientras que las actuales inmatriculaciones acreditan el DOMINIO.